Los efectos curativos de la música se conocen desde tiempos inmemorables.
Actualmente la música se emplea, con bases científicas, para lograr cambios físicos, emocionales y de conducta en las personas. Tanto en niños, como en adultos y en personas de la tercera edad sirve para mejorar los síntomas y secuelas de algunos padecimientos. Pero sobre todo para mejorar la calidad de vida de todas las personas.
El uso de la música ayuda a mejorar el funcionamiento físico, psicológico, intelectual o social de personas que tienen problemas de salud o educativos. En nuestro caso la emplearemos con niños, que no tienen por qué estar enfermos o tener algún problema, simplemente para mejorar el bienestar personal, para desarrollar la creatividad, mejorar el aprendizaje para mejorar las relaciones interpersonales y para el manejo del estrés. Mejorar la autoestima, la atención y concentración, la coordinación, el aprendizaje y la socialización entre otras serán nuestras principales preocupaciones.
DIRIGIDO A ALUMNOS CON
Falta de atención y concentración / Problemas de comportamiento / Dificultades en la socialización / Baja autoestima / Timidez y miedos / Dificultades en el aprendizaje (lectura, escritura, cálculo…)
SE TRABAJA EN 3 NIVELES
El sonoro-musical: A través de la emisión de sonidos vocales, de improvisaciones instrumentales, y la audición de sonidos o músicas grabadas.
El corporal: Ritmos y movimientos del cuerpo, gestos y posturas.
El verbal:Palabras y reflexiones que surgen a partir de la experiencia no-verbal.
CON LA MÚSICA AYUDAREMOS A DESARROLLAR
El lenguaje y la comunicación: Ya que mejora la inteligibilidad del habla incorporándole elementos del ritmo, la melodía, la acentuación y la entonación. A la vez desarrolla la expresividad vocal, enriquece las posibilidades de expresión gestual y corporal, y ayuda a expresar conflictos a través del lenguaje no-verbal.
La Motricidad: Ya que contribuye a la organización del esquema corporal y a la relación tempor-espacial; así como a la coordinación psicomotora.
La Creatividad, el bienestar personal y social: Ya que favorece el desarrollo de la sensibilidad afectiva, desarrolla sentimientos de autoestima, independencia y autonomía; y estimula la expresión y la imaginación.
Fuente: www.divertimusica.com